
Este enfoque potencia prácticas pedagógicas innovadoras para apoyar a estudiantes de diversos contextos lingüísticos, culturales y socioeconómicos. Los principales objetivos del Plan de Estudios Personalizado y del aprendizaje centrado en el estudiante son mejorar el compromiso de los estudiantes, reducir las tasas de abandono y garantizar el éxito académico a pesar de los retos interculturales. Los destinatarios son estudiantes refugiados o inmigrantes de entre 12 y 19 años, con distintos niveles de comprensión de la lengua local, varias lenguas maternas. Los principales agentes implicados son el profesorado, el equipo directivo de los centros y los padres/madres/tutores que contribuyen al enfoque educativo inclusivo del centro.